Las hermanas Gish, leyendas del cine mudo

Nacidas en Ohio como Lillian Diana (14 de octubre de 1893) y Dorothy Elizabeth de Guiche (11 de marzo de 1898), el mundo las conoció como las hermanas Lilian y Dorothy Gish. 

Lilian y Dorothy Gish

Comenzaron desde muy niñas a trabajar como modelos y, posteriormente, debutan en teatro, recorriendo gran parte de los Estados Unidos y Canadá. Amigas de infancia con Mary Pickford, la joven estrella del cine mudo les presenta, en 1912, al director David Wark Griffith. El realizador queda gratamente sorprendido con el talento de las actrices y las convoca para su corto An Unseen Enemy.

Empezó una etapa floreciente para las hermanas Gish, protagonizando con D.W. Griffith , entre otras clásicas películas mudas, Corazones del mundo (1918) y Las dos huerfanitas (1921).

Debut de las Hermanas en An Unseen Enemy (1912)

Sin dudas Lillian fue la más reconocida de las dos, apareciendo sin su hermana en otras obras del célebre director, como El nacimiento de una nación (1915), La culpa ajena (1919) y Las dos tormentas (1920).

Con el surgimiento del cine sonoro, las hermanas Gish abren un cauteloso paréntesis, dedicándose de lleno al teatro.

Lillian apareció en nuevas versiones de Tío Vania (1930) y Margarita Gautier (1932), y Dorothy actuó en muchas producciones de Broadway, incluyendo The Magnificient Yankee (1946). 

Dorothy Gish

Dorothy se casó con el actor James Rennie en 1920, no apareció en la escena de Broadway después de The man (1950), y actuó en muy pocas ocasiones en el cine sonoro, la última de las cuales fue en El cardenal (1963) de Otto Preminger. A partir de entonces, se retiraría a vivir a Inglaterra, apareciendo en contadas ocasiones en cameos en películas sonoras y consagrando el resto de su vida al teatro. Murió en Liguria, Italia, a los 70 años, enferma de neumonía. 

Lilian Gish

Lillian continuó trabajando en teatro y en cine, por ejemplo en Duelo al sol (1946) de King Vidor, La noche del cazador (1955) la única película que dirigió el actor Charles Laughton, Un día de boda (1978) de Robert Altman, Dulce libertad (1986) de Alan Alda, y Las ballenas de agosto (1987) de Lindsay Anderson.

Jamás se casó porque decía que “"El matrimonio es un negocio. Yo elegí el negocio del cine antes que el del matrimonio". Fue nominada al Oscar como mejor actriz de reparto por Duel in the Sun, en 1946. No habiendo ganado la estatuilla, la academia la homenajeó con un Oscar Honorífico en 1971. Al realizar su última película, Las ballenas de agosto, a la edad de 93 años y junto a Bette Davis, los periodistas le consultaron por la injusta ausencia en las nominaciones de los premios Oscar de entonces. La veterana actriz respondió con ironía "¡Al menos no tuve que perder ante Cher!" (Quien lo ganó ese año por Hechizo de luna).

Con 75 años de carrera, es la actriz que ha estado la mayor cantidad de años trabajando en cine. Poco antes de cumplir sus 100 años, falleció en New York en 1993.