Ella era polaca y cantante. Él, americano y publicista. Juntos recrearon al Folies Berger en Estados Unidos. Y fueron exitosos y millonarios. Ella lo abandonó por infiel, dicen. Él la cambió por una más joven, apuntan otros. Inspiraron una biopic ganadora de varios premios Oscar. Y una secuela. Y otra. Todo esto, en menos de 30 años de historia. Romance, gloria, dinero, traición y cine. Ellos fueron los protagonistas.
Anna Held nació en Varsovia en 1872. Nueve años después huye con su familia a París, escapando de la persecución antisemita. Comienza a cantar en teatros judíos hasta que, luego de la muerte de su padre, se muda a Londres, donde logra reconocimiento. Atrevida para la época, le gustaba interpretar canciones pícaras y mostrar las piernas. En 1894 se casa con el playboy uruguayo Máximo Carrera, hombre mayor con el que tiene una hija. Estando de gira por toda Europa y ya fallecido su marido en 1898, conoce a Florenz Ziegfeld, quien la entusiasma para dejar todo y acompañarlo a New York.
Ziegfeld era un hábil relacionista público, experto en el manejo de la prensa, creó gran expectativa con el debut de Anna en el país del norte. Al poco tiempo, alrededor de 1905, Held ya era millonaria y su nombre brillaba en Broadway. Pero, a la par de acrecentar su fama y capital, descubre amoríos de su esposo con otras actrices. Finalmente, la pareja se disuelve por 1914.
El visionario publicista Flo Ziegfeld había promovido al estrellato a Eugen Sandow, el padre del culturismo moderno. El fisicoculturista prusiano impresionó al joven de Chicago, que descubrió que el público más que admirar la fuerza del deportista, se maravillaba con su musculatura. Así, la rutina cambió del levantamiento de pesas a diferentes poses que exhibieran en su esplendor las formas trabajadas de Sandow.
Estando casado con Anna Held, Florenz crea en 1907 las Ziegfeld Follies, revistas musicales en Broadway que combinaban desnudos, comicidad y exhibiciones deportivas. Esta creación se hizo muy popular, siendo una idea original de su mujer, y perduró por 23 años. Por las Ziegfeld Follies pasaron estrellas como Marion Davies, Paulette Goddard, Beatrice Lillie, Dorothy Mackaill, Mae Murray y Barbara Stanwyck,entre otras.
Aun en pareja con Held, Flo conoce a la novata actriz Billie Burke, con quien vive un apasionado romance que terminaría en matrimonio.
Billie pertenecía a una familia de circo, del que su padre era el payaso. Nacida en 1885 en Washington, comienza actuando en vodevil, siendo descubierta por el gran Ziegfeld en una de sus representaciones. A los dos años de fugarse con el empresario, debuta en cine con Peggy (1916).
Por su parte, Anna viajó a Europa, actuando para los soldados franceses y recaudando fondos para afrontar la Primera Guerra Mundial. Es considerada una heroína por sus contribuciones y su valor de viajar para actuar en el frente.
En 1918, ya de regreso a América, se descompensa en el escenario y muere meses más tarde, a los 46 años. diagnosticada de mieloma múltiple. Su ex marido fue duramente criticado por no haberla ayudado durante la enfermedad y no haber asistido al funeral.
Flo y Billie viven una época de abundancia económica, hasta la muerte de él en 1932.
Ella continúa en el cine, actuando en decenas de películas, siendo la más famosa El mago de Oz (1939), donde encarna a la bruja buena del norte.
Zeigfeld Iba a entronizar a la American Girl y Broadway iba a alcanzar nuevos picos de exotismo y gloria. Este publicista, devenido en director de compañía teatral, no descubrió que podía hacer dinero con mujeres bellas y semidesnudas, pero sí fue el que ideó y creó todo un gran negocio de dinero basado en ello.
Producida por la MGM en 1936 se estrena El gran Ziegfeld, bajo la dirección de Robert Z. Leonard. El musical fue una superproducción que le costó al estudio la abultada cifra, para su tiempo, de 2 millones de dólares. La película está protagonizada por William Powell como Flo, Myrna Loy como Billie, Luise Rainer como Anne, más Fanny Brice y Ray Bolger haciendo de ellos mismos. También aparece la futura primera dama de Estados Unidos, Pat Nixon (como una de las chicas de Ziegfeld).
El film recaudó 40 millones de dólares, y ganó tres estatuillas: como mejor película, mejor actriz Luise Rainer y mejor coreografía Seymour Félix, en los Oscar de 1936, siendo nominado, además, en otros 4 rubros (director, arte, guión original y montaje).
En una especie de "fiebre Flo", en 1941 se estrena Ziegfeld Girl, dirigida también por Leonard y con James Stewart, Judy Garland, Hedy Lamarr y Lana Turner, entre otros.
Y, tan sólo 4 años después, en 1945, lanzan Ziegfeld Follies, con William Powell, Fred Astaire, Judy Garland, Lucille Ball, Gene Kelly, Esther Williams, Hume Cronyn, Keenan Wynn, Lena Horne, Lucille Bremer, Cyd Charisse y la dirección colectiva de Vincente Minnelli, Lemuel Ayers, Roy Del Ruth, Robert Lewis, George Sidney, Merrill Pye y Charles Walters. Esta nueva producción obtiene, en 1947, el premio como mejor comedia musical en el Festival de Cannes.
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