Andy Warhol, Cindy Sherman, David Lynch, entre otros realizadores, han reconocido en Maya Deren una influencia decisiva en sus modos de hacer cine. Considerada precursora del cine experimental en Estados Unidos, alma mater del underground, esta artista fue bisagra, a pesar de contar sólo con seis filmes.
Eleanora Derenkowsky, tal su verdadero nombre, nació en Ucrania en 1917 pero su familia se mudó a Nueva York en 1922, escapando de las persecuciones antisemitas. Al comenzar sus estudios de grado se une a la Liga de Jóvenes Socialistas, donde conoce a Gregory Bardacke, con el que se casa a los 18 años. Se gradúa en la Universidad de NY y realiza su maestría en New School for Social Research y en el Smith College. Tras divorciarse en 1939, trabaja como secretaria freelance, hasta que ingresa como asistente personal de la coreógrafa Katherine Dunham en 1941. En ese contexto es que conoce al fotógrafo y camarógrafo checo Alexandr Hackenschmied (Hammid), con quien se casa al año siguiente y con el que comparte la dirección de algunas de sus obras. Ambos serían influencias decisivas en la formación y la obra de Deren. La coreógrafa, bailarina y antropóloga Dunham, quien popularizó las danzas afrocaribeñas y afrocubanas y escribió una tesis sobre las danzas haitianas, con la que Maya compartió tres años en Haití.
Por su parte, su marido Alexandr Hammid fue quien la inició en el conocimiento y manejo de las técnicas cinematográficas.
Desde 1943 eligió llamarse Maya Deren. En esa época se movía en un círculo social compuesto por figuras como André Breton,Marcel Duchamp, John Cage y Anaïs Nin. Precisamente con Duchamp empiezan a filmar The witche's cradle, pero no lo terminan nunca, aunque se conserva el material sin editar.
Meshes of the Afternoon, siempre en 1943, es un cortometraje experimental que dirige con su esposo y ambos también lo protagonizan. Durante 14 minutos, Maya aparece en paisajes surrealistas, entra, sale, recorre, en una coreografía onírica. Hay elementos que despiertan su temor, como un espejo, un teléfono, un cuchillo sobre la mesa, una llave que sale de su boca. Hay poesía y delirio, en un juego de sueño/realidad constante.
La película es producto del deseo de la pareja de crear una vanguardia cinematográfica basada en problemas y tormentos psicológicos, tal como sus referentes del surrealismo Salvador Dalí y Luis Buñuel en Un perro andaluz (1929) y L' Age d'Or (1930).
En 1947 ganó el Gran Premio Internacional en el Festival de Cannes. En 1990, Meshes of the Afternoon fue seleccionado para su conservación en el Registro Nacional de Películas de los Estados Unidos por la Biblioteca del Congreso como "cultural, histórica o estéticamente importante", ingresando al registro en el segundo año de votación. En 2015, la BBC nombró a la película la 40a mejor película estadounidense jamás realizada. El film fue adquirido por el MoMA de Nueva York. El tercer marido de Maya - Teiji Ito – le añadió la música en 1959.
Sus siguientes filmes fueron: At Land (1944), fotografía de Hella Heyman y Alexander Hammid; A Study in Choreography for Camera (1945) con Talley Beatty y Ritual in Transfigured Time (1946) colaboración coreográfica con Frank Westbrook y Rita Christiani.
En uno de sus textos, El cinematógrafo como forma artística (1946), Maya expresa: “la observación, incluso la más superficial, de la producción cinematográfica revela que todo el campo está dominado por dos tipos principales: la película de ficción-entretenimiento, promovida internacionalmente por intereses comerciales, y el filme documental-educativo, promovido por individuos y organizaciones interesados en reformas sociales, educación visual y difusión cultural. Lo que falta en forma conspicua es el desarrollo del cinematógrafo como forma artística, interesada en el tipo de percepción que caracteriza a todas las formas artísticas tales como la pintura, la poesía, etc. Y dedicada al desarrollo de un idioma formal tan independiente de otras formas artísticas como éstas lo son entre ellas”.
Por su creatividad fílmica en 1946 fue galardonada con la Beca Guggenheim, convirtiéndose en la primera mujer del mundo en recibir esta beca para filmar sin condicionamientos. Gracias a este apoyo pudo financiar un viaje a Haití, donde profundiza su interés por el vudú. Filmó varias horas de estos rituales, participó de ellos y adoptó la religión. Escribió un libro al respecto - Divine horsemen: The living Gods of Haiti – que junto con sus horas de grabación fueron editadas 20 años después por Teiji Ito, su último marido, y su nueva esposa.
“Cada elemento está tan relacionado con el todo que ninguno de ellos puede cambiar sin afectar la serie y así afectar a la totalidad. Y, por el contrario, el todo es lo relacionado con todas las partes que, si se leen horizontalmente, verticalmente, en diagonal o en sentido inverso a la lógica de la totalidad no es interrumpido, se mantiene intacta” expresa Maya Deren en su libro más importante, Anagrama, donde plantea su filosofía como cineasta.
En 1948 filma Meditation on violence con el artista marcial Chao Li Chi quien se encargó de la demostración de artes marciales chinas, que sólo es tocada una vez en la edición para añadir un salto a otro plano donde aparece el artista con más ropa y con una espada. Deren utiliza elementos de la cultura afro-haitiana por primera vez, incluyendo algunos tambores de Haití acompañados de flautas chinas.
Formando equipo con la Metropolitan Opera Ballet School, en 1958, crearon The very eye of night, su último filme concluido, donde un grupo de bailarines se mueven al estilo de dioses griegos sobre un fondo de estrellas, aparentando estar libres de la fuerza de gravedad.
Dedicó gran parte de su vida profesional a mostrar sus filmes, dar charlas y seminarios, en museos, galerías de arte, universidades y centros de formación de Estados Unidos, Cuba y Canadá. Renegaba de la industria hollywoodense: “ha sido un gran obstáculo para que el cine se definiera y se desarrollara como una forma de arte creativo y fino. Hago mis películas con lo que Hollywood gasta en pintalabios”. Maya Deren fundó la Creative Film Foundation, fundación que junto a la colaboración con Cinema 16, desde 1956 hasta 1961, se dedicó a premiar el trabajo de cineastas independientes.
Maya falleció tempranamente, en 1961 a los 44 años y sus cenizas fueron esparcidas en el Monte Fuji, en Japón.
Dejaba en Film Culture este consejo para los nuevos cineastas, sumado a su valiosa obra: “las cámaras no hacen films. Los cineastas hacen films. Mejora tus films no añadiendo más equipo y personal sino usando lo que tienes a su total capacidad. La parte más importante de tu equipo eres tú mismo. Tu cuerpo móvil, tu mente imaginativa, y tu libertad para usar ambos. Asegúrate de usarlos”.
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