Parece un desafío superior para
realizadores audiovisuales de este tiempo: contar, mostrar, llegar en 60
segundos. El auge de las historias breves en redes sociales como Instagram y
TikTok pareciera facilitar la conexión con este formato para el público. Pero
a pesar de sonar novedoso, el cineminuto
es tan antiguo como el cine mismo. Hay, en todo el mundo, quienes desarrollan
obras de tan corta duración y es en Córdoba donde, desde el 2014, convergen
para su exhibición y valoración en un Festival Internacional.
“El tiempo acotado no se trata
de un objetivo en sí mismo ni de una restricción, sino más bien de un
desprendimiento lógico de aquel contenido que se quiere transmitir. Es el propio
mensaje el que demanda e impone una duración determinada y si para resolver su
planteo insume entre uno y sesenta segundos, podemos decir que estamos frente a
un cineminuto”, nos explica Carlos
Trioni, creador y fundador de Cineminuto
Córdoba, en conjunto con el resto del Grupo Cineminuto. Está desde la
primera edición a cargo de la coordinación general del festival junto a
Victoria Suárez, por parte de la Secretaría de Cultura de la SAE-UNC.
Trioni es docente universitario,
terciario y secundario, además de llevar a cabo y publicar investigaciones en
artes. Como realizador audiovisual estrenó en 2019 su ópera prima, el largometraje
"Los hipócritas”, y ha realizado 6 cineminutos que han participado en
varios festivales específicos, ganando algunos premios.
Desde su propia experiencia, nos
aclara: “En principio, el término cineminuto podría pensarse novedoso o en
sintonía plena con la fugacidad que imprimen el vertiginoso modo de vida urbano
dominante, el contexto mediático actual, las efímeras relaciones virtuales a
través de las nuevas tecnologías, los usos y exigencias de los usuarios de
Internet (fácil y rápido acceso, respuesta inmediata, etc.) y/o el desarrollo
actual del lenguaje audiovisual, que tiende a un tipo de montaje ultrarrápido.
Todo conduciría a suponer que la vida de este género o formato audiovisual es
directamente proporcional a su duración más bien breve. Pero, paradójicamente,
el inicio de su cronología coincide con el principio de la historia del cine y
los medios audiovisuales en general. Porque el cine nació con forma de
cineminuto y el cineminuto evolucionó a la par de cada cambio o transformación
técnica y artística sufrida por el cine. También llamado videominuto o
filminuto, es una forma audiovisual ultrabreve que plantea una situación
concreta, la cual generalmente no provoca transformaciones trascendentales
en el universo propio del relato, y que se plasma en pantalla a partir de
la toma precisa de decisiones narrativas y estructurales y la selección
específica de cada uno de los elementos (visuales y sonoros) que componen
la obra”.
En cuanto a los motivos por los que decidieron
dedicarle un festival a este formato, Trioni
nos indica que “debido a sus particularidades prácticas, económicas y lúdicas
es un formato muy practicado en el ámbito académico o como un mecanismo de
formación para los profesionales. Por lo que hay una producción muy vasta y
variada. Y esas piezas merecen ser vistas. Y de ahí surge la necesidad de
contar con un festival de cineminutos. Si bien algunos festivales de
cortometrajes le dedican una categoría especial o muy raramente los incluyen en
sus selecciones generales, en Argentina hasta 2014 no existía ningún evento dedicado
exclusivamente a ellos. Ahí surge Cineminuto
Córdoba, el primer y único acontecimiento de este tipo en nuestro país”.
Haciendo un poco de historia, Carlos Trioni nos comenta que egresó de
la Facultad de Artes - UNC, con el título de Licenciado en Cine y Televisión con
un proyecto de tesis que trata sobre el tema: “Había realizado una
investigación teórica y práctica sobre el cineminuto la cual incluye una
reconstrucción histórica, una descripción sobre sus elementos narrativos y
técnicos y, finalmente, un análisis sobre las condiciones de producción y
distribución. Ese último punto me interesó mucho, ya que las piezas
audiovisuales que había producido para la tesis no tenían mucha cabida en los
festivales tradicionales. Así fue que presenté un proyecto en la Secretaría de
Extensión Universitaria de la UNC para desarrollar un festival específico, el
cual fue abrazado, dándole cabida inmediatamente. Allí se sumó un grupo de
estudiantes y egresadas/os de la carrera que también tenían interés por el formato
y comenzamos a darle vida. Nuestra primera edición fue en el año 2014”.
Pasaron ya cuatro ediciones y el
festival se prepara para la quinta, que se efectuará este año. Pero el
recorrido ha sido intenso: “Sin
lugar a dudas el festival en estas 4 ediciones fue creciendo muchísimo, tanto
en participación de obras y artistas como en asistencia de público en la sala.
Paradójicamente, a pesar de ser un formato pensado para un consumo rápido,
encontró su lugar en el calendario de eventos culturales y tenemos un público
muy fiel que espera cada edición para asistir al Pabellón Argentina y ver estas
obras en pantalla grande. Año a año
fuimos sumando actividades de formación y talleres específicos sobre formatos
breves y ultra breves, capacitaciones para docentes con el objetivo de llevar
el formato al aula primaria y secundaria, muestras invitadas, retrospectivas,
tuvimos invitados, sumamos jurados de asociaciones de profesionales, etc., todo
con el objetivo de hacer cada vez más grande este festival. Y los frutos son
grandes, ya que el festival ya es reconocido por los realizadores y el público
que lo esperan con ansias. Se están cumpliendo 7 años del primer festival y realizaremos
la quinta edición. Por lo que queremos, de cierta manera, celebrar lo ocurrido
en estos años pasados”, manifiesta Trioni.
De qué manera afectaría la
pandemia al festival es una de las inquietudes lógicas surgidas en este tiempo.
El coordinador de Cineminutos Córdoba
explica que “al ser un festival bianual, la pandemia aún no nos ha afectado
directamente. En estos momentos estamos en proceso de inscripciones y estamos
recibiendo muchas piezas de todas partes del mundo, muchas de las
cuales tratan o tocan el tema de la cuarentena o pandemia. Seguramente
será el tema que articulará la próxima muestra. Pero la fecha del evento está
pactada para dentro de 5 meses, y aún no sabemos cómo evolucionará todo. Esperamos
que para mayo ya podamos contar con las condiciones para realizar las proyecciones
en sala, que permitan el encuentro entre realizadores/as y el público. Pero
caso contrario, deberemos adaptarnos como lo han hecho muchos festivales.
Internet es un aliado del cineminuto, por lo que no es descabellado pensar en
un modelo online o híbrido. Pero aún es muy pronto para determinarlo”.
Para poder conocer las obras de
ediciones anteriores se puede visitar la cineminuteca, que es un espacio
reservado en la página web del festival, donde es posible revisar y disfrutar
de las piezas ganadoras de las cuatro ediciones pasadas.
Y para inscribirse y participar
de la edición 2021, los interesados pueden ingresar a www.cineminutocordoba.com, hasta el 28 de febrero
próximo.
El festival se llevará a cabo
los días 13 y 14 de mayo y pueden participar obras de cualquier parte del mundo
que tengan una duración de 1 a 60 segundos. Pero la organización podrá poner en
consideración aquellas que se excedan en no más de 10 segundos. Los cineminutos
pueden haberse estrenado en 2019, haber participado de otros festivales,
muestras o proyecciones y estar disponibles para el visionado en la web. Son aceptados todos los géneros: animación,
ficción, documental, experimental, comedia, drama, terror. La inscripción es
sin costo y se puede presentar hasta 3 trabajos por participante.
Para finalizar, Carlos Trioni nos dice que “las
expectativas son las mismas de año a año, que llegue la mayor cantidad de
cineminutos de todas partes del mundo, sobre temas y géneros diversos. Y
lo estamos logrando. En la primera semana ya contamos con más de 100 piezas
inscriptas. Estamos felices por la llegada”.
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